El corazón de Ah' Canul - 54
Inicio
Autodefensas y alerta ciudadana
Gumercindo Tun Ku
Portada - 54
 

El desarrollo y el crecimiento de una sociedad son paralelos sin duda a muchos aspectos, tanto buenos como malos; las necesidades de mayor infraestructura en obras y mejores servicios públicos aumentan también la atención a la ciudadanía y de igual manera la seguridad. Por lo tanto, no puede descuidarse ninguno de estos aspectos por parte de las autoridades en turno.

Dentro de este proceso evolutivo no todo puede ser benévolo, pues de la misma forma en que una enredadera aparece en un frondoso árbol, igual en la sociedad nace la delincuencia, probablemente por causas diversas que quizás no entenderíamos; sin embargo, afecta a todos como tal.

Nuestra ciudad de Calkiní, últimamente está siendo asolada por una banda de ladronzuelos que ha movilizado a los habitantes; cada barrio se organiza para hacerles frente, ya que la seguridad pública ha sido rebasada. Creo, entonces, que estos grupos de ciudadanos que se comunican por medio de sus teléfonos móviles y hacen sus guardias nocturnas, lo hacen en legítima defensa de su patrimonio.

Que si son Autodefensas o grupos de Alerta ciudadana, como algunos se autodenominan, que importa, mientras velen por su propia seguridad, ya que el Estado no puede… ha dejado de lado su modelo de combate a la delincuencia, y se ha dedicado a crear su propia y utópica seguridad pública.

También han surgido algunos interrogantes como ¿quién o quiénes están detrás de todo esto?, porque no es posible que toda la ciudad esté siendo invadida por estas pandillas. Por lo pronto, es tratar de cuidarnos entre todos, aunque parezca inadmisible la presencia ciudadana en grupos que hagan justicia por su propia mano; las movilizaciones van en aumento y con reconocimiento.

Si la autoridad quiere entrarle, algo tiene que hacer; aquí no se trata de discursos ni de estadísticas, sino de realidades. Que los policías bajen de las patrullas, que caminen, que se organicen y rompan ese viejo esquema de rondines que no funcionan para el pueblo.