Dos viejos amigos

Una hora de amistad
Ayer me regalaron
Y vinieron a la mente
Los sonidos del recuerdo
Los mismos fierros estuvieron
En el encuentro como testigos
De dos viejos amigos
Que en su juventud, aquí,
Con el ejercicio físico, sudaron.

Y en las paredes del recinto
Adecuado como gimnasio
Me pareció escuchar
Los mismos sonidos de antaño:
Entre esfuerzos y sudores,
Entre profundas respiraciones,
Entre sonidos de los fierros,
El eco de las voces,
Creí sentir en un instante
La presencia de mi amigo
A través del tiempo y el espacio
En este viejo gimnasio
El mismo ambiente como testigo
Del ayer y del presente,
Que me dicen,
Que me revelan,
Que me recuerdan,
Que aún estamos vivos,
Y la amistad de Fred Berzunza
A quien yo admiro
Perdurara en el corazón,
En el espíritu y el alma
Así como los recuerdos de antaño
Que nos guardan
El eco de las voces
En las paredes barnizadas
Con la pátina del tiempo
Entre esfuerzos y sudores
Entre bromas y nuevas hazañas,
confundidos, con los sonidos de los fierros.

Son los hechos que se graban
Y se quedan atrapados en el tiempo,
En la memoria y el espacio,
Muy profundo… muy adentro!
En las paredes del gimnasio
En las telarañas de mi mente
En los rincones del cerebro
El eco de las voces
Los sonidos de los fierros
Y la alegría de revivir
En un instante… con mi amigo
Aquellos viejos recuerdos!!!