El corazón de Ah' Canul - 28
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Jaina
"Lugar de la casa del agua"
Felipe J. Castellanos Arcila
Portada -28
 

Al sur de Isla Arena, Municipio de Calkiní, frente y muy cercana a la costa de Hecelchakàn, se sitúa sobre una prolongación cortada por el mar, un lugar donde los mayas decidieron construir un centro ceremonial. Para ello tuvieron que rellenar ese espacio, acarreando troncos de mangle y toneladas de sascab, tierra blanca caliza, desde considerables distancias, con las cuales levantaron una especie de plataforma artificial, inicialmente de un poco más de un metro y medio de altura, sobre la cual construyeron sus primeras edificaciones, que con el tiempo fueron cubiertas con nuevos rellenos, hasta alcanzar una altura de tres metros en la plataforma y sobre ella, otras nuevas construcciones mayores.

Al poco tiempo de iniciada su construcción, el lugar se convirtió en una necrópolis de importancia, cobrando su mayor auge por el año 600 d. C.

Una plaza central, delimitada en sus extremos, oriente y poniente, por sendos basamentos de los templos el Zacpol y el Sayosal; un Juego de Pelota al lado norte y una plataforma con cuartos del lado sur, conforman el complejo arquitectónico, a su alrededor innumerables enterramientos, hechos directamente en el suelo, acompañados de ofrendas, entre éstas las mundialmente famosas figurillas de barro.

Las figurillas de barro, que han dado fama a este sitio, representan aspectos de la vida cotidiana del lugar y circunvecinos: deidades, guerreros, artesanos, sacer-dotes, jugadores de pelota, animales, que sorprenden por la fidelidad y perfección con las que fueron realizadas.

Jaina estuvo estrechamente ligada con el Cacicazgo de los Ah Canul.

“En los mares de los Canules està comprendida la monumental ciudad de los cobaenses. KinchilCobà y Homonchè. En los términos del cielo alcanzan los mares de los Canules, el tèrmino de los mares de los Canules. En aquellos mares de los Canules tenía sus barcos Ah Kìn Canul. Tenìa cuatro barcos en que pescaban sus esclavos. Estaban en el pozo de Sanicté, allì se encontraban cuando llegaron los españoles en la puerta de la tierra de los campechanos, en la puerta de su mar.” Códice de Calkiní.

Traducción de Alfredo Barrera Vásquez

Jaina, formaba parte de esta Provincia que proveía de especies marinas y de sal a números grupos mayas.

La sal formó parte del tributo que los indígenas entregaban a los encomenderos españoles, ubicados en Campeche, en tiempos de la Conquista.

Real de Salinas, al extremo norte de la costa calkiniense, proveía de sal hasta años posteriores de la medianía del siglo pasado.

Gran parte de las figurillas mayas de Jaina forman parte del acervo de coleccionistas extranjeros, otras se exhiben en el Museo Nacional de Antropología de la Ciudad de Mèxico y en nuestro medio, podemos admirarlas en el Museo Regional de Arte Maya, ubicado en el centro histórico de la vecina ciudad de Hecelchakán, en el Estado de Campeche.

Jaina, como Real de Salinas, el Bosque Petrificado, Punta Pájaros, el Estero de Celestún y Las Bocas, pueden ser visitados desde Isla Arena a través de una corta travesía por toda la costa de nuestro municipio.