Las barreras y las fronteras han sido rebasadas por el poder de la comunicación instantánea y abierta a todos los habitantes del mundo, en el pasado siglo XX, permitiendo un nuevo auge de conocimientos compartidos a través del internet; una herramienta de más, que se ha convertido en la solución a una comunicación rápida y directa.

Este medio, ha ayudado a cambiar la concepción y percepción que las personas tenían del mundo, ahora se trata de concebir una humanidad sin fronteras y cada día más unida en torno al planeta, a los acontecimientos sociales y al medio ambiente; menos barreras filosóficas y etnográficas permite mostrar la actitud de cada uno ante sus semejantes.

El internet es una herramienta de mayor capacidad de información a distancia que ha traído consigo la tecnología mundial, la modernidad comunicacional; que facilita las relaciones humanas aun en el sentido virtual, haciéndonos reflexionar acerca de su correcto manejo.

Esta “telaraña mundial” obliga a pensar en las continuas transformaciones de las relaciones humanas, debido a que la comunicación crea una nueva forma de entender la interacción del hombre con la sociedad.

La pagina Web, como documento electrónico permite acceder desde cualquier punto del mundo a aspectos educativos, científicos y culturales de cualquier lugar, es una fuente de información.

Calkini.net es una página de “la red de redes” que ha llevado hasta los confines del planeta la cronología histórica y cultural de nuestro pueblo; los acontecimientos diarios de su gente, sus tradiciones, sus usos y costumbres, sus artesanías, sus fiestas y su folklor, además, las bellezas naturales de sus paisajes turísticos. .

Durante estos nueve años el municipio de Calkiní, a través de Calkiní.net está a la luz del mundo.

Hago un reconocimiento público a esta página, en agradecimiento, POR SU NOVENO ANIVERSARIO. Ya que a través de ella, nos hemos permitido llegar a ustedes con nuestros modestos comentarios, sin hacer a un lado la gran distinción hacia la noble y loable labor de su creador, Santiago Canto Sosa. Cronista de la ciudad. En hora buena.