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Opinión de Gumercindo Tun Ku
 
(18 de abril de 2011)
Artículos de Gumercindo (2010-2011)

23 de abril Día Internacional del Libro

 
Portada del libro "Andamio roto" de Ramiro Suárez Huchín
 

Si de pronto leyeras en primera plana, en uno de los diarios de mayor circulación, el siguiente encabezado: “SECUESTRO EN LA BIBLIOTECA”, lo primero que pensarías, de seguro, es que la delincuencia nos ha rebasado y nos alcanza hasta en cualquier lugar donde estemos; quizás no pasaría en tu mente ni siquiera de manera remota que se trata de un programa implementado para el fomento a la lectura.

Bien, pues para que no nos sorprendan debemos estar más despiertos, tener una mente más ágil, y pensar que también, un buen libro, puede secuestrarnos y pedirnos a cambio, más tiempo y dedicación a su lectura, puesto que sólo a través de este ejercicio podremos ser cada día mejores.

La lectura ha sido, al paso de los años sólo un mecanismo obligatorio para una evaluación académica, donde los que leen siempre son los mismos, los maestros y los alumnos; y solamente en los lugares destinados, escuelas y bibliotecas; sin embargo, no pasa de lo mismo, utilidad académica, tenemos que leer para memorizar fechas y nombres para un examen y una calificación con resultados a veces muy poco favorables.

Esta lectura inquisitoria, debe terminar, debemos leer para muchas cosas más; si bien es cierto e innegable que las instituciones hacen la parte que les toca, según el concepto de educación más integral y de calidad que elevará la productividad y mejorará la calidad de vida de los ciudadanos, contribuyendo al desarrollo y crecimiento de la sociedad, creo conveniente afirmar que todo esto sería maravillosamente exitoso si se logrará como consecuencia de un buen hábito de lectura.

Los libros, deben ser los mejores amigos del ser humano, ya que nos guían a través de la poesía, el cuento, las novelas, o de algún otro género; abren las puertas que nos conducen a otros mundos, a los lugares más lejanos, extraños y fascinantes, montados sobre las alas de nuestra mente y sobre el mar infinito de la imaginación. El hábito de una buena lectura que apasiona el alma, que nutre el espíritu de fortaleza filosófica, y enseña y acrecienta el intelecto humano, será el arca sobre la montaña, en este diluvio de oscurantismo y estatismo imaginativo y recreativo del siglo XXI.

El pasado 2 de abril se celebró el día del libro infantil en gratitud a la aportación cultural que nos legara el autor del patito feo y del soldadito de plomo, Hans Christian Andersen; y este próximo 23 de abril celebraremos también el día internacional del libro y el derecho del autor, en memoria de otros dos grandes de la literatura, Cervantes y Shakespeare. Estas fechas simbólicas para la literatura universal dedicadas para rendir homenaje mundial al libro y sus autores, buscan también alentar a todos, especialmente a niños y jóvenes, a descubrir el placer de la lectura, estos días deben marcar nuevos episodios en la vida del hombre.

Hagamos de la lectura, parte de nuestra vida cotidiana, leamos en todos los espacios posibles: escuelas, casas, parques, jardines, plazas, hospitales, banquetas y en todo lugar donde un libro, lejos de robar un espacio, traiga paz y tranquilidad; contribuyamos a incentivar a los niños y jóvenes a tomar un libro; la lectura divierte, se goza, entretiene, abre la mente y la imaginación. Quien más lea, tendrá siempre más agudeza mental.

Padres de familia y profesores, tomemos la antorcha, seamos el faro hacia el hábito de la lectura.

Por eso, súmate y lee algunos minutos con tus hermanos, amigos, vecinos e hijos, celebremos leyendo, este día y todos los que vendrán.

 

 
 
 
Fuente: texto enviado por Gumercindo Tun Ku, 18/04/2011 // Fotos: Santiago Canto Sosa; 2011